En el corazón palpitante de Córdoba, se erige una joya del tiempo, un tesoro escondido entre las calles sinuosas del casco histórico: nuestro querido Patio del Posadero.
El edificio es mucho más que un hotel boutique; es un testimonio viviente de siglos de historia y cultura, restaurado con un amor tan profundo que cada rincón susurra historias del pasado.
Y así era nuestro Patio cuando nos enamoramos de él para hacer nuestro sueño realidad.
Patio del Posadero, originalmente una casa-patio del siglo XV, ha sido testigo de los pasos del tiempo, acogiendo en su seno a generaciones de familias que vivieron y amaron bajo su sombra.
Sus paredes de piedra, testigos silentes de la riqueza de culturas que han pasado por Córdoba, conservan la esencia de cada una, desde los ecos de la Al-Andalus hasta la elegancia renacentista, amalgamándose en un abrazo eterno que solo el tiempo puede forjar.
A continuación, verás algunas imágenes del proceso de inicio y construcción del Patio del Posadero hasta convertirse en lo que nació en marzo de 2015
En el corazón palpitante de Córdoba, se erige una joya del tiempo, un tesoro escondido entre las calles sinuosas del casco histórico: nuestro querido Patio del Posadero.
El edificio es mucho más que un hotel boutique; es un testimonio viviente de siglos de historia y cultura, restaurado con un amor tan profundo que cada rincón susurra historias del pasado.
Patio del Posadero, originalmente una casa-patio del siglo XV, ha sido testigo de los pasos del tiempo, acogiendo en su seno a generaciones de familias que vivieron y amaron bajo su sombra.
Sus paredes de piedra, testigos silentes de la riqueza de culturas que han pasado por Córdoba, conservan la esencia de cada una, desde los ecos de la Al-Andalus hasta la elegancia renacentista, amalgamándose en un abrazo eterno que solo el tiempo puede forjar.
Y así es cómo lo disfrutamos hoy después de depositar en su restauración y diseño todo el amor y pasión que sentimos.
En el corazón palpitante de Córdoba, se erige una joya del tiempo, un tesoro escondido entre las calles sinuosas del casco histórico: nuestro querido Patio del Posadero.
El edificio es mucho más que un hotel boutique; es un testimonio viviente de siglos de historia y cultura, restaurado con un amor tan profundo que cada rincón susurra historias del pasado.
Patio del Posadero, originalmente una casa-patio del siglo XV, ha sido testigo de los pasos del tiempo, acogiendo en su seno a generaciones de familias que vivieron y amaron bajo su sombra.
Sus paredes de piedra, testigos silentes de la riqueza de culturas que han pasado por Córdoba, conservan la esencia de cada una, desde los ecos de la Al-Andalus hasta la elegancia renacentista, amalgamándose en un abrazo eterno que solo el tiempo puede forjar.
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